¿Afectan al tattoo? ¿Se va a deformar? ¿Debería esperar a tener la forma física que quiero tener? ¿Y si me quedo embarazada?
¡Bienvenidos Nigromantes al blog de hoy!
Hoy hablaremos de los tattoos y los cambios que pueden sufrir si nos tatuamos y nuestra forma física cambia.
Se tiene la creencia errónea de que, cuando te haces un tatuaje (o varios) y, posteriormente, cambia tu forma física, éste se va a deformar.
Bien, esto es FALSO. Al menos, relativamente. Si el cambio es dado de forma natural, también se dará de manera progresiva. La piel se estirará y/o contraerá y tus tattoos con ella. De modo que, quizá el aspecto de nuestro tattoo se vea ligeramente distinto pero no por ello mejor o peor, simplemente se adaptará a su nueva forma cada vez que nuestro cuerpo cambie. Sí es cierto que si el cambio se da de forma muy brusca, tal vez sí sea posible que se deformen, pero no ocurre así como norma general.
No se debe temer a tatuarse y engordar/adelgazar porque los tattoos se adaptarán a ti y a tu cuerpo. Un ejemplo visual de esto es el de Tim Lambesis, que cambió mucho de forma física pero de forma progresiva y sus tattoos siguen viéndose bien, diferentes, pero bien o incluso mejor.
Entonces, ¿Qué pasa con una mujer embarazada?
Pasaría exactamente lo mismo. Los tattoos se adaptarán a medida que la barriga crece y posteriormente volverán a su forma inicial cuando ésta disminuya después del parto. Simplemente, habrá que tener en cuenta hidratar y nutrir bien la zona, como pasaría exactamente igual si no se tienen tattoos.
Otro perfecto ejemplo visual sería el de Monami Frost, podemos apreciar como sus tattoos (además en lettering y realismo) se adaptaron y posteriormente volvieron a su estado inicial, tras dos embarazos.
